miércoles, 31 de enero de 2007

DEFECTOS FATALES


Todos tenemos defectos, pero si son demasiado marcados se hacen insoportables. Los defectos fatales son rasgos sumamente peligrosos y destructivos en nuestra relación afectiva de pareja.

a) Adicciones: Al relacionarse con una persona que tiene una adicción, está jugando con fuego, y muy probablemente se quemará. Amar a una persona con una adicción es amar a alguien que no es libre, que no siente plenamente, que está inconsciente y prisionero. Se encontrará en un triángulo amoroso: usted, su pareja y la sustancia a la que ésta sea adicta.

b) La cólera: Una persona irritable, con poca tolerancia a la frustración, convierte la vida en un tormento para sí mismo y los demás. Se vive sumido en el temor, las discusiones y las críticas. Es como vivir con una bomba que nunca se sabe cuando va a explotar. La aflicción reprimida en la infancia surge en forma de cólera cuando somos adultos.

c) Conciencia de víctima: Es una actitud ante la vida de queja y pesadumbre. Disfrutan sufriendo y echándole la culpa a los demás. Por mucho que se les de nunca será suficiente y no se animarán por más que se les consuele. En vez de cambiar las cosas prefieren quejarse y no les resulta fácil ser responsables y autónomos, evitando tomar decisiones.


d) Afán de control: Se afana por controlarlo todo y tomar todas las decisiones por sí mismo. El dice lo que hay que hacer. Son dominantes y posesivos.

e) Disfunción sexual: Si su pareja es adicta a la pornografía, flirtea demasiado, no funciona sexualmente o no demuestra interés sexual, no pase por alto estos defectos fatales. No es divertido hablar de ellos o afrontarlos, pero evitar enfrentarlos es lo peor.

f) Inmadurez: Cuanto más se comporte su pareja como un niño, tanto peor será su vida y su relación. Si es irresponsable, si no cumple sus compromisos, si espera que alguien lo haga todo por ella, si no equilibra su presupuesto ni planifica, si no es capaz de conservar su trabajo, si es poco confiable es señal de inmadurez. No esperamos que un niño pequeño llegue a la hora en punto, cumpla sus promesas, recuerde las reglas o haga todo aquello que dijo que haría. Un padre paciente sabe que el niño está aprendiendo. Pero de una pareja adulta sí debería poder fiarse uno, y si no es así, se habrá enamorado usted de alguien que todavía no ha crecido.

g) Emocionalmente inalcanzable: Manténgase lejos de personas que no estén emocionalmente disponibles. Hay en el mundo muchas personas ávidas por amarle y recibir su amor a cambio. ¿Por qué elegir a alguien a quien resulta tan difícil abrirse, y pasarse el tiempo tratando de entreabrir el corazón de esa persona? Algunas personas no están dispuestas a tener una relación porque se sienten emocionalmente bloqueadas. Necesitan realizar una curación en serio antes de que sean capaces de dar y recibir amor. Si no puede mostrar emociones, o no puede o desea hablar de sentimientos, ni puede abrirse ni confiar en nadie, entonces usted está frente a alguien emocionalmente inalcanzable.

h) Su pareja no se ha recuperado de relaciones pasadas: Cuanto mayor sea la cólera y el resentimiento que abrigue en su corazón por lo ocurrido en el pasado, menos capaz será de amar en el presente. Puede que necesite tiempo y ayuda psicológica para evaluar lo ocurrido en el pasado, y para aceptar la responsabilidad por su participación en lo que ocurrió. Su pareja se siente todavía traumatizada por haberse visto herida en su relación anterior, o se siente culpable por su responsabilidad.

i) Daños emocionales sufridos en la infancia: Todos hemos sufrido daños emocionales en la infancia, pero las preguntas que hay que hacerse son: ¿Hasta qué punto fue grave el daño emocional sufrido por mi posible pareja cuando ésta era joven? ¿Es mi pareja consciente de ese daño emocional y de cómo afecta a su capacidad para funcionar en una relación? ¿Está mi pareja trabajando activamente para reparar ese daño emocional (mediante lecturas, alguna terapia, seminario, etc.)? Las respuestas a estas preguntas determinarán si su pareja será "fatal" o no.

También podría suceder que conozca a alguien que tuvo una infancia relativamente feliz, pero que fue completamente echada a perder por una madre complaciente y, que debido a la mala educación, es testarudo y obstinado, e incapaz de mantener una buena relación. No olvide evaluarse a sí mismo para comprender su propia personalidad. El daño emocional puede ser referido al maltrato y trauma sexual, maltrato físico o verbal, abandono de los padres por divorcio, muerte, adopción, suicidio, distancia emocional, desórdenes alimenticios, adicciones de los padres, fanatismo religioso, etc.

No solamente hay obstáculos en el mundo interior de la persona, sino también en el mundo exterior, que condenan al fracaso la relación. Factores tales como diferencias significativas de edad, origen religioso diferente, origen social, étnico o educativo diferente, parientes intoxicadores, ex esposa intoxicadora, hijastros intoxicadores, relaciones a larga distancia, etc.
Extraído del Libro: ¿Eres mi media naranja?

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